Mientras que del segundo ya hemos hablado, la gran novedad es el Mistrale. Estéticamente, vemos como el preparador cuenta ya con un lenguaje propio, así lo demuestran los panales en fibra de carbono en los laterales, las ópticas LED en el frontal o las generosas entradas de aire que reinan por doquier.
A las aportaciones estéticas se suman las que importan: las mecánicas. Cuando en su momento hablamos sobre el Gemballa Tornado, no se habían publicado los datos definitivos de la potencia final del V8 de 4.8 litros tras pasar por la manos del preparador. Hoy la cosa es distinta y sabemos que el motor que comparten el Panamera Turbo y el Cayenne Turbo contará con dos niveles de preparación. El primero o Stage One, incrementa la potencia del Gemballa Mistrale hasta los 610 CV, mientras que en el Gemballa Tornado lo hace hasta los 580 CV. La vuelta de tuerca es el Stage Two, que subirá la entrega de ambas preparaciones a los 700 CV. Para conseguir este incremento de potencia además de lo habituales retoques de en la centralita electrónica, se suman un nuevo colector de admisión, además de revisarse los turbocompresores, los intercoolers y el sistema de escape.
Estas dos joyas estarán presentes en la exclusiva muestra monegasca y se medirán en corto con otras tantas bellezas de cuatro ruedas.
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